6 de septiembre de 2016

López, Margarita y Chong lideran las preferencias. PRI, en dificultades

Por Jaime Duarte Mtz.
Socio Director de SIGNUMS Imagen y Reputación
@JaimeDuarte
www.JAIMEDUARTE.com.mx


Diversas encuestas recientes como la de El Financiero, Reforma y El Universal dan como favoritos en las preferencias electorales a Margarita Zavala, Andrés Manuel López Obrador y a Miguel Ángel Osorio Chong en su camino a la elección presidencial del 2018. Véase encuesta de El Financiero aquí

La esposa del ex mandatario Felipe Calderón ha tenido la virtud de posicionar su marca personal por encima de cualquier otro miembro de su partido. Ha realizado una precampaña audaz al recorrer gran parte del País y de saber emplear los medios de comunicación en su favor. Margarita goza de una estupenda imagen pública entre la militancia de Acción Nacional y se ve muy difícil que el aún gobernador de Puebla, Moreno Valle, la alcance, como el propio presidente Anaya del CEN. Su mayor reto será no sólo el obtener la nominación interna del PAN como candidata presidencial sino el de convencer al electorado indeciso de apoyarla cuando carece de experiencia seria de gobierno.

No obstante su mérito mediático de continuar presente en la escena política nacional, López Obrador ha venido perdiendo vigor y "punch". Su reciente apoyo irracional o ¿estratégico? a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) ha dañado su imagen política. Asimismo, su negativa hasta hoy para conformar un frente amplio que aglutine al PRD, PT, Convergencia y demás partidos de la izquierda mexicana en torno a su partido MORENA, le restan posibilidades reales de triunfo. Este "Lula" mexicano tiene en Mancera a su más importante rival; una alianza ¿imposible? con el actual Jefe de Gobierno de la Ciudad de México haría crecer probablemente la intención del voto, pero quizá no le sea suficiente para ganar. AMLO no es Lula y México no es Brasil. Sin ese "frente" está out por tercera vez.

En torno al secretario de Gobernación, Osorio Chong, considero que enfrenta más desafíos internos y externos que, en mi opinión, lo dejan ya fuera de la jugada en el camino a Los Pinos. Para competir realmente requiere: 1º del "espaldarazo" de su jefe -quien más bien tiene su afecto político en otra parte (¿Meade, Nuño o Videgaray?)- y 2º contar con el respaldo del nuevo líder del tricolor Enrique Ochoa Reza, al tiempo de 3º persuadir a la opinión pública de que ha hecho un mejor papel en materia de seguridad pública (frente a los casos de Tlatlaya, Ayotzinapa, Nochixtlán y las acusaciones de Congresistas norteamericanos por las más de 27 mil desapariciones en México, como parte de la violación a los derechos humanos). Si bien los temas de la impunidad y la corrupción no pueden adjudicarse a una sola persona, su pertenencia al gabinete lo afectan igualmente en términos de percepción.

Desde luego que a esos factores adversos para Osorio debemos sumar los resultados electorales deficitarios del PRI de julio de 2016, y la terrible cantidad de pifias que ha cometido el presidente Peña Nieto a lo largo de su sexenio que en este blog he puntualizado. Sumen a estas fallas políticas y de comunicación el supuesto plagio de su tesis profesional y su tremenda denostación por la invitación a Donald Trump a México. 

Veo muy difícil, casi imposible, que el Presidente, su partido y cualquiera que sea su candidato oficial a la Presidencia de la República se recuperen de tantos yerros, consigan mejorar su imagen y su aceptación entre los mexicanos. Hoy, al menos, parece que ya se terminó el sexenio priísta y, también, se fueron sus posibilidades de mantenerse otros seis años más el poder. El nuevo formato del 4º Informe de Gobierno intentó acercar más al mandatario al pueblo, pero no es suficiente. Cuando se pierde la credibilidad, se perdió ¡todo!

Les invito a estar atentos a las precampañas de todos los "suspirantes" a partir de hoy y hasta diciembre de 2016, en las cuales veremos, por ejemplo, si se concreta una alianza ¿imposible? PAN-PRD, se "destapan" Osorio, Meade, Nuño o Videgaray, o bien, si surgen nuevos aspirantes independientes (como el "Bronco", Mancera, Pedro Ferriz y Jorge Castañeda). 

No perdamos de vista, igualmente, los comicios en el Estado de México en 2017; serán el mejor "termómetro" para medir la intención del voto.

Ya es tiempo de definiciones y redefiniciones de cara al 2018, lo sabe la clase política; es ahora o nunca.

Jaime Duarte Mtz.


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