21 de septiembre de 2017

Entre el dolor y el heroísmo ¡despertó México!

Por Jaime Duarte Mtz., 
Consultor en Imagen y Reputación Política y Corporativa

Fue el sismo del 19 de septiembre el fenómeno detonante que "despertó" a la sociedad mexicana. Tuvo que ser la "naturaleza" la causante del sacudimiento -literal- de nuestras conciencias. 7.1º en la "escala de miedo".

El sufrimiento ajeno movió nuestras entrañas y nos sacó de un largo letargo de 32 años. Sí, fue otra vez la desgracia, la muerte y la destrucción como en 1985, el acicate "necesario" y lamentable que nos hizo reaccionar desde el pasado martes. 

México se "paralizó" en sus actividades habituales, pero se movilizó de forma extraordinaria en todo lo largo y ancho del País. El verdadero "mover a México" no vino de arriba, de Los Pinos, sino de abajo, de la calle, de la gente.

Las conmovedoras imágenes de cientos de miles de mexicanos en la Ciudad de México, como en municipios de Morelos, Estado de México, Puebla y Chiapas, donde se registraron los mayores daños por el temblor, son el indicador más elocuente de que ¡México despertó! 


Hoy los nuevos héroes de la Patria -en este mes aún patrio- son los albañiles, los franeleros, los transeúntes, las amas de casa, los jóvenes, los empleados, los policías, los bomberos, los médicos, los soldados, ¡los perros!... en una palabra ¡los ciudadanos! ¡Todos están allí! La gente sencilla, valiente y generosa, que se ha volcado a las calles convertida en brigadista para rescatar al vecino, al amigo o al familiar, sin importar sexo, ideología, color, religión o preferencia sexual. (Ver aquí fotos y videos de los verdaderos héroes).

Sí, la solidaridad entre los mexicanos --pese a la desgracia-- nos ha hecho sentir que aún hay esperanza, que todavía podemos creer que sí es posible soñar, cambiar y reconstruir un México más grande y mejor. El ánimo y orgullo nacional está hoy por los cielos. ¿Cuándo habíamos visto, por ejemplo, que un "chilango" se sintiera orgulloso de serlo y de gritarlo? 

El mundo ha quedado asombrado, boquiabierto, al ver un México unido y hermanado ante la adversidad, y nos ha dado también su mano amiga. ¡Gracias!

El impacto del sismo en la generación actual, en los chavos, en los jóvenes estudiantes, en los millennials, en los "ninis" (al ver, tocar, oler y "saborear" directamente el dolor de la muerte, el consuelo de la pena y la alegría y esperanza del salvamento en la tenaz búsqueda de sobrevivientes) dejará una huella indeleble en sus mentes y en sus corazones. ¡Ya encontraron o re descubrieron una causa superior, un resorte poderoso de su existir! No volverán a ser iguales. 

Y esta emoción y convicción que nos embarga a todos --que deseo se extienda para el futuro y siempre-- tendrá un efecto colateral sumamente positivo en la conciencia social y política de la juventud y de los ciudadanos. Sí, su noción de la vida, de lo frágil y vulnerable que es, se trasladará de las calles a las aulas, a los hogares, ¡a las urnas!

"Estimados" gobernantes y "querida" clase política: 

¡Tiemblen! El 9-SEP marca un punto de inflexión más, un parte aguas en la vida nacional. ¡Atrás quedó la "eterna" apatía e indiferencia! ¡Los ciudadanos han despertado! Esta "sociedad civil", de por sí hastiada por tanta inseguridad, injusticia, corrupción, impunidad, etc. percibida como proveniente de ustedes, estará más atenta a sus decisiones no solo en torno a las labores de reconstrucción, sino del destino de los recursos económicos de nuestros impuestos para ese fin y para sus campañas electorales, como también de quienes nos representarán en 2018.

Ustedes saben ahora que no somos los mismos, que es nuestro momento, que nos hemos "empoderado", que deberán redoblar sus esfuerzos por recuperar nuestra confianza y, quizá entonces, ganar nuestro voto. ¡Cuidado con los millones de "indecisos", con los "apáticos" millennials y con los tradicionales abstencionistas porque ya dejaron de serlo!

Decidir obstinadamente por su parte destinar 6 mil 788 millones de pesos para sus campañas es su suicidio político. No redirigir una considerable parte de estos recursos a la reconstrucción de las ciudades, colonias, calles y casas destrozadas, como a los damnificados, será su ruina. Es su gran oportunidad de mostrar sensibilidad, responsabilidad y patriotismo.

Y cuidado con desviar recursos para elaborar despensas para sus campañas, ¿he? Ya el Obispo de Cuernavaca denunció que apoyos no llegaron al pueblo, porque los acaparó el DIF. 




Por ahora, más de un millón y medio de mexicanos han firmado la exigencia "debe el INE donar los casi 7 mil millones de los partidos a víctimas del sismo 7/sept.", una iniciativa de change.org . Aquí el vínculo a la petición.

¿Qué van a hacer? ¿Cómo planean revertir su deteriorada imagen pública?

#FuerzaMéxico
#PrayForMexico
#MexicoEstaDePie
#sismomexico2017
#TodosSomosMéxico
#NoEstánSolosMexicanos
#PartidosDenNuestroDinero

www.JAIMEDUARTE.com.mx
@JaimeDuarte

Ver también: "¿Qué nos dicen las catástrofes de México, Houston, El Caribe, Puerto Rico...? Aquí

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